En formato trío (Arnau Grabolosa a los teclados y sintetizadores, Sara Oliver a la batería y Martí Cabarroques al saxo). Grabu combina el jazz con toques de electrónica y recursos sintéticos, expresando su imaginario a través de sesiones en directo con bucles, texturas e improvisación, siempre buscando que los espectadores conecten con los sonidos que desprenden sus composiciones.
Musicalmente, Grabu busca que los espectadores conecten con los sonidos que desprenden sus composiciones, pero no con la cara de los músicos.